Semana de clásico

Son días diferentes. Con todo respeto para los demás equipos lo digo. Estos días previos a enfrentar al Niupi son más intensos. Todos miramos el calendario y queremos que sea una semana sin sábado (bueh! me fui al carajo), que el domingo llegue y que nos encontremos con los discipulos de Benji y Oliver.

La semifinal terminó de convertir a este partido en algo especial, en un mojón dentro de todos los que tenemos que enfrentar, ganar este partido no salva el año, de ninguna manera ,pero nos deja trabajar con mayor tranquilidad, con renovado espíritu. No arrancamos bien, es cierto, pero el fútbol nos pone esta revancha hermosa a la vuelta de la esquina, para eliminar fantasmas, para templar el corazón y reforzar las ilusiones.
Atrás quedaron las polémicas, que si entró que si no, que si fue "orsay" que si no, ya nada importa, es parte del pasado, ahora la historia es diferente, tenemos otros 80 minutos de fútbol contra el equipo que nos robó la ilusión de jugar la final y es el próximo domingo el día en que tenemos que juntar nuestras voluntades y ser más fuertes, vamos a ganar, simplemente porque lo deseamos con más fuerza que ellos.
Esta semana tenemos la palabra de dos jugadores que encaran este clásico de manera diferente uno Horacio "anulá-tranquilo" Lavagna, fue el autor del gol que no fue en la mencionada semifinal y el otro Anibal "misil-tierra-aire" Arias nunca disputó un clásico.


Horacio: "Estamos tranquilos, recuperándonos de nuestras lesiones para llegar con nuestro arsenal al 100%, con muchas ganas de jugar y levantar nuestro nivel de juego. La semifinal es una herida que costó en cicatrizar pero ahora tenemos que herirlos a ellos. Debemos estar muy atentos a los pelotazos del 5 del Niupi, Gaby García, y los desbordes de José Pablo Figueredo. Con respecto al Negro Javier considero que hay que hacerle sentir la garra rocketera"


Anibal: "Esta semana la vivo tranquilo, sin presiones, motivado como para jugar contra cualquiera. Nunca jugué un clásico, es mi materia pendiente,razones laborales me impidieron hacerlo, pero a 1000 km de distancia de mis compañeros sufrí la misma angustia que ellos y se que para muchos el domingo es una revancha. Cuidar del Niupi? Que se preocupen en cuidar a la novia, no hago pronósticos, para eso está Andy. Al negro Javier habrá que hacerle comer algún caño, como en las prácticas"

Asi estamos. Enchufados. Motivados. Con ganas de que llegue el partido y que, sin nada extra fútbol que empañe el resultado, podamos festejar una victoria o saludar a los jugadores del Niupi si la diosa Nike prefiere decantarse por ellos.
Tenemos todo lo necesario y más para ganar el partido. Hagámoslo.